Rock/Metal
Como han hecho desde que comenzaron su carrera, Superbia introducía algunas novedades en el sonido de la banda, disco con el que volvieron tras años en el dique seco y que nos hizo encontrarnos con una banda que volvía con aires frescos y renovados, con su característica personalidad intacta.
Ahora con Letargo vuelven, un disco que abre con Afrodita, un tema de largo desarrollo muy trabajado, con un cierto aire a Tool en su comienzo, que a pesar de sus claras similitudes con los americanos en sus principios como banda hacía tiempo que no notaba. Muchos cambios de ritmo, con cierto toque progresivo y unas melodías también destacables. El contraste entre riffs duros y partes melódicas será una constante a lo largo de todo el disco. Insecto, primera canción que dejaron escucharnos, baja bastante el listón, con cierto toque industrial en los riffs, que me han recordado a Rammstein.
Blancanieve, primer single, suena a los Sôber de Paradysso, con unas melodías que suenan perfectamente ensambladas a los riffs entrecortados de fondo. El tema que da título al disco, Letargo, es el más diferente de todos, ahondando más en la parte tranquila del grupo, que cuenta con unos buenos arreglos y con un final más cañero recordando de nuevo a la banda del calvo Manyard.
Mañana es el siguiente título, una canción estándar, que no destaca en nada, solo negativamente, por esos arreglos de electrónica que le dan un aire cutre a la canción. Volvemos a ganar en calidad con Fugaz y esas guitarras post rockeras donde Jorge y Antonio dan rienda suelta a sus melodías. A destacar su última parte que gana en fuerza y contundencia.
La parte final del disco es la que menos me ha gustado, canciones como Unax, se me hacen aburridas, con recursos que hemos escuchado en ellos cientos de veces, a pesar de que tenga un significado muy emotivo (os dejo que lo averigüeis). Capricho y sus orquestaciones, junto a voces operísticas tampoco me dicen nada, ya escuchamos estos experimentos en Superbia y quedaron mucho mejor que aquí.
Un disco que seguro que encantará a los más fanáticos del grupo pero que a mí se me ha hecho largo. Las letras esta vez han dado un bajón y hay algunas que no encajan, un claro ejemplo está en Insecto y eso de: "lavarme la cara sin tí" que se me hace muy cuesta arriba. La voz de Carlos está como siempre, que es justamente lo bueno y lo malo, primero porque su voz es el aire distintivo del grupo pero se hace monótona cuando llevamos ya más de la mitad del disco. Va siendo hora de probar algo nuevo en este aspecto. Un disco que suena a continuación del anterior pero con ideas peores, que sigue demostrándonos a unos Sôber que instrumentalmente están cada vez mejor pero cuyas ideas empiezan un poco a agotarse.
-Lo mejor: Esa dualidad tan característica entre caña y melodía.
-Lo peor: Los peores arreglos están en las peores canciones.
NOTA: 6,5
Tracklist:
1. Afrodita (06:00)
2. Insecto (03:40)
3. Blancanieve (04:20)
4. Encadenado (04:47)
5. Letargo 04:47)
6. Mañana (05:01)
7. Fugaz (03:59)
8. Tal Día Como Hoy (04:41)
9. Unax (04:59)
10. Capricho (05:19)
11. Morfina (04:24)
12. Otoño (04:36)
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